Vans apuesta por los nuevos valores de la música con #VansMusiciansWanted

Vans, la marca original de deportes de acción e ícono mundial de la autoexpresión creativa, tiene el orgullo de lanzar la competición Vans Musicians Wanted #VansMusiciansWanted a nivel mundial, por primera vez desde su creación en 2015. El Musicians Wanted de Vans es el programa de música global de la marca que tiene como objetivo ofrecer una plataforma para los músicos que están empezando. El evento evaluará los nuevos talentos “Off The Wall” de todos los géneros. Para su estreno mundial en 2020, cada región del mundo ofrecerá a los artistas no descubiertos la oportunidad de obtener una exposición internacional y la posibilidad de compartir el escenario con el artista ganador del Grammy Anderson .Paak. Entre los premios adicionales se incluyen productos Vans, equipo Fender, distribución global de música, lista de reproducción en Spotify, Apple Music ¡y mucho más!

Creado originalmente en Vans Musicians de la región del pacífico asiático en 2015, el concurso de música Vans Musicians Wanted empezó como un programa para permitir directamente a los músicos locales no descubiertos presentar su música original y ser descubiertos a nivel nacional. Con más de 7000 artistas que han entrado en el programa desde su creación, Vans tiene orgullo de lanzar el programa a nivel mundial para dar la bienvenida a artistas de los Estados Unidos, Canadá, México, América Central y del Sur, Europa y regiones del pacífico asiático para tener la oportunidad de compartir su música original con el mundo. Los artistas pueden presentar su música original desde el 28 de septiembre del 2020 hasta el 11 de octubre en www.vans.com.pe/pages/musicianswanted

La Vans convierte la plataforma global 2020 en una serie de competiciones verdaderamente digitales y abiertas a todos los músicos y géneros musicales. La marca continúa curando y construyendo experiencias optimizadas para lo digital; permitiendo a los talentos potenciales de cualquier lugar la oportunidad de participar a través de la sumisión digital de la música y los conciertos virtuales a escala mundial.

Con la presencia de jueces invitados especiales como parte del proceso de selección, Vans Musicians Wanted da la bienvenida a J.I.D y Bohan Phoenix, artistas que aparecen en la última campaña de la marca Vans, ‘THIS IS OFF THE WALL’, la cantante y compositora europea Nilüfer Yanya, y el artista ganador de un Grammy, Anderson .Paak. Tres artistas serán elegidos para presentarse en el Concierto Virtual Vans Musicians Wanted , que se celebrará este diciembre. El ganador del gran premio será seleccionado para recibir productos Vans, Equipo Fender, distribución global de música, lista de reproducción de Spotify y Apple Music y la oportunidad de compartir el escenario con Anderson .Paak como artista de apertura en 2021.

El concurso Musicians Wanted de Vans es una plataforma global inclusiva que permite la autoexpresión creativa por medio de la música y proporciona un camino directo para que los artistas no descubiertos se destaquen y obtengan exposición global. Para presentar tu música original ahora y leer las reglas oficiales del concurso, visita vans.com.pe/pages/musicianswanted .

EMBAJADORES PERÚ, VANS MUSICIANS WANTED

Alejandro y Maria Laura. Dúo, banda, pareja, co-autores. Desde el 2009 han publicado tres discos y recientemente algunos singles como Babas, Hasta donde mande el cuerpo, Sana sana y La Princesa y el Río. En el 2019 celebraron 10 años de carrera en el Gran Teatro Nacional y fueron parte del cartel del Festival Estéreo Picnic en Colombia. Actualmente trabajan como productores en su propio estudio componiendo para un cuarto álbum y colaborando con artistas emergentes. Ganadores del Premio Canteras a “Mejor canción”, Premio Luces, como “Grupo del año” en 2014 por el diario El Comercio, Premio Generarock como “Mejor disco del año” en 2015 y Premio Ibermúsicas de composición en 2016.

Diazepunk. Con 20 años en los escenarios es una de las bandas más representativas del punk rock de Lima. La banda tiene 5 álbumes de estudio y más de una veintena de singles de los cuales destaca “NID”, su tema más conocido y considerado por muchos uno de los clásicos modernos del rock peruano. Su última producción, POP reúne a sus integrantes originales Gustavo “Gutty” Makino y Take Nakankari en las guitarras, Mauricio “Mapache” Llona en la batería, Javi Landa en el bajo y Carlos García en la voz. En el 2007 su disco “Ciudad Indiferente” es reconocido como Disco del Año con el premio Luces del diario El Comercio. Como parte de la celebración por los 20 años de la banda se estrenará próximamente el disco en vivo “Diazepunk, 20 años”.

 

La moda de Leslie Shaw

La moda de leslie Shaw | LaCentral.pe

“El rock ya no está de moda” dijo Leslie Shaw. Me he tomado el tiempo de leer comentarios y opiniones y lo primero que debo decir es que de ninguna manera la opinión de Leslie o de quien sea es razón para responderle con insultos machistas, sexistas y misóginos.

Dicho esto…

La moda no depende de gustos masivos espontáneos, depende de las campañas millonarias en medios en las que las corporaciones musicales invierten para dirigir el gusto de la gente hacia sus artistas. De ahí que los catálogos de las radios nacionales y los gustos masivos del país coinciden en los artistas de Sony, Warner y Universal.

En la experiencia con el punk melódico local, escena de la que llevo 20 años formando parte, no ha sido distinto… el “Chikipunk” existía bajo la superficie. Cuando el género llega a la radio peruana llega con bandas de afuera: Blink 182, Sum41, The Ataris, previamente de Green Day y Offspring y posteriormente My Chemical Romance, Jimmy Eat World, etc. En una radio pequeña de Lima sonaba de vez en cuando Wirito de 6 Voltios por lo simpática que le resultaba la letra a algunos dj´s. Cuando todo eso llega el género ya se difundía en las tiendas de Galerías Brasil y otros espacios rockeros construidos décadas atrás, también en mp3 por Ares o Emule, en los foros de internet, entre las comunas o páginas como 23punk.

Pasamos de bares pequeños a conciertos más grandes y eventos sold out sin que nuestra música suene en las radios.

El punk melódico seguía siendo de lo que menos se escuchaba en el país. Por el lado comercial sonaba Líbido, algunos temas de Pedro Suarez Vertiz, La Liga del Sueño, Mar de Copas, Zen y varias bandas más disputaban lo que la radio dejaba todavía para artistas locales.

El rock que yo conozco es más que una moda pues siempre se ha construido con autogestión, con mucho esfuerzo. He viajado tocando y produciendo por el norte y por el sur del país y puedo dar fe de que el ímpetu rockero sigue vivo, se renueva constantemente y es muy fuerte.

El rock es una tradición, una subcultura, no una moda. Es rebelde y prefiere siempre sostenerse en su trabajo antes que besar zapatos para lograr ser el ripio en el catálogo de alguna transnacional.

No es la primera vez que alguien se sostiene del género de moda para anunciar la muerte del rock ¿Y ahora dónde están?
Nacionales e internacionales coquetean con el género urbano. Larga es la lista de artistas peruanos que mutan según lo que esté de moda y tienen una carrera mediática basada en cualquier cosa menos su música… otros ni la mediática logran y viven de interpretar éxitos ajenos de antaño. Que un género esté de moda no significa que quien lo practique se hará famoso.

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Hay que mirar bien dónde está parado uno antes de gritar que “el rock ha pasado de moda” pues muchos de los rockeros o ex rockeros que se han alineado con Leslie están haciendo carrera solamente en espacios rockeros y por más que coquetean a lo más mainstream sin ninguna vergüenza, en los espacios del género Urbano… no aparecen.

No sorprende entonces que Leslie algún tiempo atrás haya querido hacer rock también, ahora que las corporaciones tienen el ojo en otros ritmos es probable que ella sienta la necesidad de reubicarse con los comandos corporativos de la música. Es probable también que anunciar la muerte del rock sea solo una estrategia para ponerse en boca de alguien.

Ojalá que ahora que va de la mano de Sony si le ligue …y pronto, antes que sea ella quien pase de moda.

Mientras tanto un playlist con rock que sigue sonando en todo el Perú

Difundir: todo por la escena

Difundir: Todo por la escena

La música es de muy poco interés para el Estado peruano. Para que reciba apoyo de la empresa privada debe pasar por unos filtros extrañísimos, algunos de clase, otros de discurso, que muchas veces vuelven a las piezas inocuas, tontas, uniformes y aburridas. Las radios por lo general están estancadas en el tiempo y solo a veces abren espacios gruesos como un hilo a propuestas nuevas. Lo hacen por obligación. Para el músico peruano difundir su trabajo es una proeza casi imposible en su objetivo de hacerse de un público. Todo por la escena, llegó el momento de difundir.

El panorama es triste, es verdad. Sin embargo, sí existen iniciativas independientes y valientes que difunden el trabajo de músicos locales. La Central.pe conversó con tres de estas y quisimos saber más sobre sus interesantes y creativas propuestas

Pogos Peruanos
Hace unos días se viralizó un video en el que la muy reconocida banda peruana Dolores Delirio se sube a un bus, una combi, a comentar sobre los problemas mencionados y cómo el músico los afronta. “Somos la banda Dolores Delirio, tenemos 25 años haciendo música aquí en el Perú, batallando con la falta de interés de los medios y, sin embargo, sosteniendo por medio siglo un proyecto musical”, dice el cantante Ricardo Brenneisen sosteniendo su guitarra en medio de pasajeros que suben y bajan en la alocada Lima.

Previamente, Fabriccio Saravia, creador de Pogos peruanos, había “calentado al público”. Así, comentó su iniciativa y explicó todo el universo musical que nos estamos perdiendo por el poco aprecio que el Estado y la empresa privada le tienen a nuestros músicos.

Empezó aproximadamente en Diciembre del 2018 sin saber muy bien qué contenido hacer en sus cuentas de Instagram y Facebook. Hacerse de un público se le hizo difícil, probó con memes de música, luego con memes de cualquier cosa a ver si alguien enganchaba… pero nada… o muy poco. Las cosas cambiaron cuando un día se sube a la línea de buses 10E y empezó a hablar de por qué cree que no se escucha música local en su país, de porque nuestras radios están repletas de músicos extranjeros habiendo tanto talento local, talento que él se había dado el trabajo de ir conociendo y ordenando en una hoja de Excel.

Volantes repartidos en los buses por Pogos Peruanos

600 músicos de distintos géneros había logrado organizar en su hoja de cálculo, con una app para elegir aleatoriamente dividió los nombres en 4 listas e imprimió volantes para repartir a la gente que lo escuchaba en las combis en su nueva rutina diaria

Fabriccio reparte los volantes en el bus todas las mañanas rumbo a su trabajo, el restaurant de su padre. Mientras lo hace comenta a los pasajeros de su indignación por el espaldarazo que reciben los músicos peruanos que él tanto aprecia.

“Viva el Perú” gritó un señor mayor cuando terminó uno de sus discursos. Otros jóvenes se ponían el celular en la cara para no tener que mirarlo a los ojos, “No gracias” le decían a sus volantes… se ponían los audífonos a escuchar quien sabe qué, mientras en la radio del bus una orquesta peruana de salsa interpreta los covers de los únicos temas autorizados a sonar hace 30 años.

Hoy su página tiene alrededor de 3000 personas y Fabriccio sueña con crecer, hacer eventos y -quien sabe- empezar pronto una revolución cultural

Pierre on the rocks

Son pocas las páginas de rock peruano con esfuerzos interesantes. No es fácil hacer contenido de calidad cuando lo único que aparece en el presupuesto es el entusiasmo. Por ello, un gran número están llenas de copy/paste de notas de prensa o entrevistas que además de pobres en contenido se ven y suenan mal. Así es imposible conseguir muchos seguidores.

Esto ha generado que los productores de conciertos vean con malos ojos a muchas iniciativas independientes por difundir el rock local y no suelen darles acceso o incluso responderles los correos y mensajes. En este problema, Pierre Cárdenas, productor y conductor de Pierre on the rocks, encontró una traba complicada que casi lo hace desistir. Pero no lo hizo.

Pierre es hincha a muerte del rock nacional. Llegó de Huancayo en el 2010 cuando la mayoría de sus bandas favoritas de la escena “chikipunk” empezaban a desaparecer. Ahí empieza su fijación con el registro. ¿Qué pasará con las bandas de acá a 10 años? ¿Dónde estaremos nosotros? ¿Dónde estaré yo? El dilema existencial de Pierre dispara su entusiasmo y decide empezar a registrar conciertos primero con una cámara de fotos y luego con una cámara de video.

A veces acompañado de su hermana, estudiante de cine, pasea por los conciertos buscando respuesta a sus preguntas. ¿Cómo se verán todos estos chicos y chicas que vienen a los conciertos de acá a 20 años? Se acercó a ellos para entrevistarlos. Así empezó a hacerse de un público fiel y lleno de fanáticos del rock peruano de distintas partes del país. A Pierre on the rocks lo siguen no solo desde Lima sino también desde Tacna, Trujillo, Arequipa, y más ciudades que disfrutan de sus videos.

Los asistentes ya lo reconocen, y se emocionan cuando les toca ser entrevistados. Es un logro bastante emocionante para un proyecto que tiene alrededor de dos años de vida. “Me gusta tanto el rock nacional que voy a ir a muchos conciertos, así acumularé contenido”, pensó. Su estrategia para ganar seguidores fue hacer videos “tipo karaoke” con canciones de bandas peruanas. Se “colgaba” de canciones de Mar de Copas, Líbido, Amén, etc., y la gente visitaba su página para cantar desde sus casas.

La combinación de estos dos productos llevó a que un día, mediante un amigo, lo invitaran a cubrir el “Chikipunk Fest”. Bien acreditado como prensa pudo tener un primer acercamiento a las bandas y ese fue un primer hito en su trabajo de difusión. Con el tiempo se ha hecho un nombre, los artistas lo reconocen y lo invitan a cubrir sus conciertos, los productores de conciertos responden sus mensajes y ojalá pronto los productores de festivales también

Sawá Sesiones
En un país centralista como el Perú, la situación siempre se agrava para quienes no viven en la capital. Para bandas de otras ciudades es muy difícil hacerse una carrera sin migrar. Los medios aunque más pequeños son casi igual de esquivos con las propuesta locales salvo en los casos de géneros específicos y relacionados con la tradición.

En Cajamarca, Kiara Lozano y Jose Alberto Osorio buscaban qué hacer después de terminar la carrera de Comunicación Audiovisual en la universidad allá por el año 2013. Encontraron en la escena musical cajamarquina de la que eran parte una necesidad urgente de registro visual y sonoro de calidad. Nuevamente la necesidad de documentar su cultura y su tiempo. Este encargo, que debería ser del Estado, recae en las manos de estos dos motivados jóvenes con el objetivo de difundir la cultura musical cajamarquina. Se trata de una tarea tan enorme como importante.

La primera banda que grabaron fue una banda de rock cristiana. Se juntaron con ella para escuchar las ideas de los músicos durante la pre producción. Aterrizaron todo eso y luego por medio de amistades o tocando timbres lograron los recursos necesarios para la producción.

Cada sesión toma aproximadamente unas 8 horas dependiendo de su complejidad. Kiara y Jose Alberto no cobran aún por su trabajo en Sawá, tampoco los compañeros que se han ido sumando al proyecto. El sonidista y los equipos corren por cuenta de la banda. Las bandas con integrantes adultos y con mejor economía son las que pueden pagar los entre 500 y 600 soles que cuestan el sonidista y los equipos. ¿Cuántas bandas jóvenes estarán lejos de esta hermosa iniciativa?

Los canales locales de televisión exigen que su nombre encabece la autoría de los videos a cambio de un espacio. Aún con esas condiciones la televisora no busca ningún auspicio, mal negocio. Considerando el tiempo y talento invertido desde la pre-producción hasta la post producción estamos hablando de un proyecto que merece la atención de todo el país y que necesita ser financiado para crecer.

Sawá sesiones no ha logrado solamente un formato con identidad propia y difundir montones de bandas en su canal si no que han creado una mística muy interesante entre audiovisuales y músicos cajamarquinos que, además de participar en la producción, ayudan a difundirlo en sus redes sociales. Así Sawá ha llegado a Ayacucho a grabar a Ayapacha R4 logrando videoclips de muy buena factura, de bandas muy talentosas que por su ubicación geográfica se ven limitadas sus posibilidades de difusión a nivel nacional. Poco a poco, con organización y persistencia Sawá sesiones está generando un circuito interesante.

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¿Cuántas bandas más, cuántas iniciativas más se necesitan para que el Estado peruano y los medios de comunicación presten atención a la música que se hace y se consume en el Perú? ¿Cuánto del espectro radioeléctrico beneficia a los trabajadores de la música en nuestro país? El Estado y los medios de comunicación tienen una deuda enorme con el artista peruano que sobrevive con ingenio y creatividad a las condiciones en las que se le obliga a ejercer su trabajo. En muchos casos, se vuelve solo la mirada para el elogio cuando es premiado y las palabras sentidas cuando fallece. Por suerte para todos los peruanos, hay quienes tomaron la iniciativa heróica de generar registro de estas culturas silenciadas.

Tomar control: en la cresta del Hardcore Femenino

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Tomar Control es una banda hardcore femenina que viene apareciendo en varios carteles de conciertos peruanos. Han girado por Chile y Argentina y así han llevado sus temas -feministas, veganos y ‘straight edge’- a espacios donde pocas bandas peruanas han llegado. Sueñan con hacer pronto una gira europea y siendo una banda que se jacta de ser ordenada, activa y disciplinada es muy probable que pronto lo estén cumpliendo.

Nos reunimos un domingo luego de su ensayo y tuvimos esta conversación:

¿Se han sentido bienvenidas en la escena?

Malena: Mira, en la escena hardcore, siempre ha sido bravazo. En cada show hardcore que hemos participado siempre nos hemos sentido superbienvenidas. Pero llegada la hora de explorar otros escenarios, otras escenas, hemos tenido suerte de encontrar aunque sea un grupo pequeño que escucha hardcore, nos conoce, y se para adelante a poguear las canciones.  Y los que no nos conocen o nunca han escuchado hardcore, no están tan acostumbrados al sonido de repente, se quedan, tal vez escuchando. Nunca hemos sufrido bullying en vivo pero si nos ha pasado que mientras tocamos la gente se quede mirando y lo entendemos perfectamente porque es gente que no está acostumbrada al sonido del hardcore. Lo importante es que mientras tengamos a una persona que nos escucha en el show todo está bien porque por lo menos a una persona vamos a llegar.

¿Cuál es el objetivo musical de Tomar Control?

Carmen: Llevar el mensaje del hardcore. En el hardcore encontré algo que no encontré en el punk. Aquí veo feminismo, veo luchas y mensajes. El mensaje es muy importante y que llegue a todos lados. No importa si son 10 o 100 personas lo importante es que llegue.
July: La música es una herramienta y eso es algo que muchas bandas olvidan. Algunas incluso empiezan con mensaje y en el camino lo dejan o se olvidan porque importa más tocar en más conciertos o para no chocar con el público al que el mensaje no le pueda gustar. A la banda nos importa mucho el mensaje, divertirnos y llegar a más lugares.

¿Cuáles son las luchas de Tomar Control?

Malena: Hay diferentes luchas, todas somos distintas, hay de todo.
Carmen: En nuestra banda hay diferentes mensajes. Algunas somos ‘straight edge’, algunas somos veganas y todas respetamos las luchas de todas.
Dahlia: Yo ya no soy ‘straight’. Pero lo fui cuando conocí el hardcore. Me gustó encontrarme con una escena que tenía tanto que decirle a los jóvenes. Llevar ese mensaje contestatario, antisistema, y sin autodestrucción me gustó. Ser ‘straigth’ es vivir sobrio y sin drogas.
July: Yo no era feminista; Malena sí y Luchita -la anterior baterista de la banda- era recontra feminista. Pero llega un momento en que el feminismo lo tienes en tu cara y empecé a averiguar y educarme y me di cuenta que si era necesario hablarlo y asumirlo. Me hice feminista en el 2017.

¿Qué significa ser feminista?

Malena: Hay un momento en la vida de casi todas las chicas que ven tantas parodias, tantas burlas, tantos memes en internet que les da miedo decir que son feministas. Creen que las feministas odian a los hombres, que quieren que se mueran mi papá y mi hermano (risas). Cuando ves tanto odio a un movimiento que no conoces tal vez te retraes. Tuve la suerte de encontrarme con amigas que me hicieron ver que el feminismo es una herramienta necesaria tanto para chicas y chicos para tumbar al patriarcado. Tomé el feminismo, lo abracé, y ahora amo el movimiento, amo a todas las chicas que se consideran feministas y a las que no, las entiendo y estoy segura que si todos investigamos y leemos el mundo sería mejor. Hay que anotar que en la escena no solo hay mujeres haciendo música: hay mujeres en el público, en el sonido, haciendo fanzines, hay mujeres en todas partes. Hay una minoría de mujeres haciendo música y haciendo de todo en la escena: todas inspiran a que más mujeres quieran hacer cosas.

¿Sienten que su discurso ofende?

July: Cuando hablamos de feminismo hay gente que se siente atacada sobretodo algunos hombres. Piensan que tenemos algo contra ellos, que odiamos a los hombres o lo toman personal.
Carmen: Sí, hay gente que lo toma personal, empieza la controversia, salen los memes, empiezan a trollear en redes. (Risas)
July: Sí pero no nos afecta.

¿Recuerdan algún concierto con especial cariño?

Malena: Cuando tocamos en las “Noches de Lima”, un evento de la Municipalidad en la plaza San Martin con miles de personas en el público nos solidarizamos con las trabajadoras de limpieza que estaban protestando. Aprovechamos el espacio para decir eso y luego para hablar de los feminicidios, incluso tocamos con nuestra pañoleta verde porque justo era el pañuelazo en Argentina por la legalización del aborto que es un tema super sensible, super fuerte. Pero teníamos que aprovechar ese momento para decirlo. Entonces ya nos imaginábamos que nos iban a pifear, a gritar asesinas aborteras, pero ya, qué importa, vamos a decirlo. Pero la gente lo recibió nuestra presentación de manera positiva. Hubo gente que seguro no le gustó, pero la mayoría de gente aplaudió, se sumó, las chicas que estaban atrás se pasaron para adelante. Fue hermoso. Si pues teníamos miedo pero teníamos que decirlo.
Carmen: Cuando bajamos del escenario unas señoras se nos acercaron a decirnos que les gustó mucho. Igual en un concierto en una fundación una señora que trabajaba ahí nos pidió ir al baño para poder tomarnos una foto porque le gustó nuestra presentación y desde ahí siempre nos escribe.

¿Qué impresiones tienen de la escena peruana?

Dahlia: Yo empecé en la escena punk, yendo a conciertos. Luego pasé por la escena metal y al final llegué a la escena hardcore. Me gustó mucho que sean gente solidaria, no te dejan, te ayudan. A diferencia de otras escenas donde hasta parece que disfrutaran maltratarte.
July: En la escena rockera aún falta decir algo. Está bien pasarla bien y tocar. Son pocas las bandas que hablan sobre política, violencia de género, no hay eso en la mayoría de la escena rockera. Cosas que si vemos en la escena más underground o punk.
Malena: La música es fuente de entretenimiento. Pero al mismo tiempo es también una oportunidad de decir algo. Somos poquísimas las personas que podemos pararnos en un escenario y decir algo. Si tú te vas a parar en un escenario y lo único que quieres es entretener a la gente y bailar, todo está bien, perfecto, pero si pudiesen darse la oportunidad de tomar aunque sea solo una de las canciones de su setlist para decir algo que todo el país necesita, sería genial. Somos un país en crisis política, crisis de feminicidios, te puedes parar en el escenario y decir algo de lo que está pasando.
Carmen: Ahora cuando voy a conciertos veo gente nueva y ya no hay tanto mensaje político. Hay puro ego. Personas en redes peleando por quién es más vieja escuela, nueva escuela, los memes, quién fue más, quién fue menos, quién ganó a quién, por qué abres tal show, por qué compartes escenario con esa banda que no lo merece. Cosas así.
Dahlia: Es que ahora hay redes sociales pues. Antes nadie se metía contigo, nadie te decía nada, eras libre, no hacían bullying. Se han olvidado de los mensajes que una banda debe tener.

¿Le han hecho bullying en redes sociales?

July: Sí pero casos aislados.
Malena: Son muy pocos. Antes reaccionamos, con el tiempo ya aprendimos que es mejor no responder.
July: Lo que hacemos es concentrarnos en la gente que nos apoya, que tiene comentarios positivos.

¿Para ser integrante de Tomar Control hay códigos estrictos?

Todas: Uuuuuuf…. debates, peleas, todo. (Risas)
July:
Tenemos debates y discusiones sobre ser ‘straight edge’ que se ponen intensas pero no son peleas. Cuando vino Dahlia solamente le explicamos que la banda tenía diferentes temas que tratar, veganismo, feminismo, y varios más. Lo importante es que todas estén de acuerdo con lo que dice la banda.
Carmen: Que nos llevemos bien y bueno, que haya química.

Ficha técnica: Tomar Control
Malena Malloy – Guitarra
July Salazar – Voz
Dahlia Odd – Batería
Carmen Rosa – Bajo

Los discos de Tomar Control son:
Lo que llevamos dentro (2015)
Nunca más callar (2019)

Lucybell: 20 años de ‘Rojo eterno’

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En 1997, Lucybell ya recibía elogios de propios y extraños con Viajar, un álbum que marcaba un crecimiento notorio frente a su disco debut, Peces. Con sencillos exitosos, una propuesta musical estimulante, y una fanaticada en crecimiento, la expectativa por el tercer disco fue grande. Tras su lanzamiento a fines de 1998, la recepción de aquel disco de portada roja y un par de pequeños aeroplanos en la esquina inferior fue sorpresiva y, al mismo tiempo, significó un parteaguas: mientras algunos fans no encontraban canciones ‘con gancho’, otros celebraban el riesgo musical que tomó la banda.

Este álbum representó el fin de Lucybell como cuarteto, pues tras su lanzamiento se produjo la salida de Marcelo Muñoz y Gabriel Vigliensoni, a raíz de rencillas personales que fueron insalvables. Este y otros detalles ayudaron a nutrir la noción de que el ‘disco rojo’ fue el más complicado de realizar.

Dos décadas después, la banda de Claudio Valenzuela, Eduardo Caces y Cote Foncea vuelve a Lima para tocarlo en su totalidad. Esta es la conversación que tuvimos con el power trío chileno, a pocas horas de teñirnos de rojo para celebrar las dos décadas de su estupendo disco de portada roja.

¿Qué les gusta tanto de nuestra ciudad que nunca dejan de visitarnos?

Claudio Valenzuela: [Ríe] Se dan varios factores: el más importante es que a la gente gusta mucho de la banda y tienen ganas de ver a Lucybell tocando en Perú.

Eduardo Caces: La cercanía también. Perú se ha vuelto un lugar obligado de gira, ya sea yendo hacia el norte o volviendo para ir al sur, es muy potente. En los últimos años no ha habido ninguna gira en donde no hayamos visitado Lima. Tenemos ganas de tocar en otras ciudades, sin ninguna duda, es un misterio lo que pasa alrededor de Lima, pero queremos ir. Lima siempre ha sido un lugar con muy buena acogida.

Esta vez llegan para celebrar los 20 años del llamado ‘disco rojo’. ¿Qué representa este álbum para la banda?

Cote Foncea: Es disco disruptivo, intenso y emocional para su época. Chile es un país pequeño donde los músicos tienen un contacto permanente pese a la diferencia de estilos. En esa época nosotros estábamos grabando con Dracma -otro proyecto- y de pronto se fueron dando estos lazos y vínculos en conciertos y salas de ensayo. Lo que hicieron Claudio, Marcelo, Francisco y Gabriel fue juntar estas máquinas portátiles, unirlas, conectarlas de una forma y crear un formato de grabación que hasta el momento no había existido. Esa era la gran apuesta de ellos.

Además, la tensión de generar un disco sobre la marcha fue difícil de llevar.  Fue muy intenso, y eso se refleja en el album: una carga emocional de diez canciones súper densas que quedaron bien reflejadas en ese tiempo. Fue un cambio para mí. En ese tiempo Lucybell era una banda que tenía sólidos hits en una época muy histérica para Chile, la postdictadura. Creo que por eso toda esa energía se condensó en nuestro arte y en el de muchas otras bandas.

CV: Nacieron muy buenas producciones en esa época, también.

CF: Sí, las compañías de discos aportaban lo que debían para generar el contenido y dar la plataforma financiera para que las bandas pudieran lograr de la mejor forma sacar un disco. Con Lucybell se hizo. Fue una apuesta súper fuerte en esos años.

En el Perú durante esos años no se contaba con tanta información con lo que sucedía musicalmente en otros países. Se decía que el ‘disco rojo’ era un denso, tenso, muy ‘cerebral’, y que fue un disco que causó muchos conflictos. ¿Se puede traducir eso de estas canciones?

CV: Partir de cero para hacer una producción es una decisión difícil que representó un gran riesgo. Alquilamos un salón para instalar un estudio donde nos pusimos a trabajar sin tener ninguna idea previa: todo lo que teníamos que trabajar tenía que ser creado en ese lugar. Fueron muchas las presiones que nos pusimos de forma personal y artística. Y no es simple estar predispuesto a hacerlo de esa manera. Eso fue creando un proceso en el que era muy difícil que una idea se pudiera desarrollar, que pudiera ir más allá de lo que conocíamos. Cada día muchas ideas nacían y se mataban, se guardaban o desaparecían. Las que quedaron fueron las que están dentro del disco. Al final de los tres meses nos dimos cuenta de que realmente teníamos seis o siete canciones… con suerte. Necesitábamos tener un disco, y teníamos que ir a mezclar a Argentina. Por eso fue un proceso tenso, de mucha presión y creo que fue la razón por la cual el disco tiene esa energía, esa fuerza. Como lo he dicho todo el tiempo, no me arrepiento de haberlo hecho. No sé si lo volvería a hacer. Creo que en los tiempos que corren sería muy diferente.

También es importante lo que dice Cote. Producíamos con tres máquinas que por lo general funcionaban bien, pero, al final, todo eso era un experimento, entonces a veces no funcionaba tan bien. Muchos factores jugaron un rol en el medio de todo lo que iba pasando para producir tensión y presión. Pero tampoco teníamos un concepto musical predispuesto de lo queríamos hacer, qué estilo queríamos crear. Solo sabíamos eso: teníamos que desarrollar las ideas que íbamos creando en el lugar. Ahí está el resultado. Insisto: hubiera sido imposible hacer este disco de otra manera.

EC: Es un disco valiente. Hace veinte años cuando yo lo escuché, ya conocía el disco ‘Viajar’ y empezamos a tener una relación cercana. Extrañamente, en esa fecha previa confabulación al disco rojo, me junté mucho con ellos, los veía, los iba a ver a conciertos, hubo cercanía, éramos amigos. Me llamó la atención. La lógica del tercer disco podría haber sido de un greatest hits, pero fue una apuesta muy potente: El primer sencillo es’Flotar es caer’, un tema de siete minutos, con una cifra que no era cuatro cuartos. Había varios ingredientes dentro de esta apuesta que me pareció muy valiente. Creo que de alguna forma es parte del ADN de Lucybell. Hacer girar esa perilla hacia algo que es “normal” pero al mismo tiempo forzarla un poco más para que ocurra el acto artístico. Creo que esas diez canciones cumplen ese objetivo y para la gente no pasó desapercibido. Sí creo que podemos coincidir que fue una apuesta potente a un ‘Viajar’, a un ‘Carnaval’, a un ‘Vete’, canciones que estaban dentro del pop-rock. Acá empujaron el disco en ese momento, lo empujaron tanto que se fueron a un barranco… pero significó un trabajo artístico muy potente, y que nos lleva hoy a celebrarlo.

Ustedes tres como banda tienen más tiempo e incluso más discos que ese Lucybell original que concluye con el disco rojo. ¿Qué les ha significado toda esta etapa como banda?

CV: Los músicos debemos ir en una evolución constante, si seguimos cantando la misma canción… la gente lo nota, la gente lo sabe muy bien. Especialmente en estos tiempos donde la oferta musical es una locura. No sé si uno puede saber cuántas canciones por día salen en Spotify o en alguna otra red. Hay mucha información y muchas ganas de escuchar música, y uno tiene que ir sorprendiéndose para también sorprender a la gente. Eso tiene que ver con evolución, con decir que tu música sea una verdad, algo que sea transparente con lo que tú sientes y que representa lo que eres en el momento que hiciste la canción.

Evento: Lucybell Veinte Años Rojo

Fecha: Jueves 29 de noviembre – 10 P.M.

Lugar: Discoteca Vent1 (Petit Thouars 2161, Lince)

Morrissey: cuando pienses en volver

Ayer Morrissey dio un concierto en Lima en el Parque de la Exposición. No pude evitar recordar lo que pasó en su última visita a nuestro país: se intoxicó al comer Penne a la Puttanesca en una trattoria limeña, se atragantó con un fideo y murió. Fue muy triste, sobre todo para sus fans.

¿Y ahora qué vamos a hacer con todo el dinero invertido?, se preguntaron los empresarios. Había que buscar una solución para seguir produciendo billetes. ¿Qué hacer?

El productor inglés Vlad Mountyesno conoció en esos días a un ex marino peruano muy parecido al cantante -casi idéntico en realidad- con el que incluso se habían tomado algunas fotos en los días que pasaron por Perú. La solución estaba ahí frente a sus ojos. El tipo no tenía mucho que lo atara a nuestro país.

Los traumas de la guerra interna lo habían vuelto un hombre violento, razón por la que su familia y amigos se alejaron de él. Abandonado por el gobierno de Alberto Fujimori, pero no por su partido, vivía con las justas de lo que ganaba como parte de la portátil fujimorista yendo a cada evento, mitin o manifestación a la que lo convocaban.

Con lo que no contaba Vlad es que esto tendría consecuencias…

El No-Morrissey que hoy conocemos reproduce ese discurso que repetía en la portátil fujimorista y lo globaliza. De ahí los arranques fachos de No-Morrissey contra los inmigrantes y la pasión por los discursos conservadores europeos.

El viejo marino, al que la guerra y el Estado peruano dejaron abandonado a su suerte, hoy viaja  por el mundo conociendo los discursos originales del fascismo, gozando de los lujos de los que goza una estrella de rock (sin comer carne eso sí, no se puede romper el mito) y conociendo finalmente a qué sabe el caviar.

Creo que no es el único caso donde se reemplaza a un músico.

Reemplazar músicos sirve para no romper la lógica de pan y circo con la que el Estado manipula las mentes de la ciudadanía ni afectar los bolsillos de los empresarios para evitar ahuyentar la inversión privada.

Es una práctica más común de lo que parece desde que murió Paul McCartney y lo reemplazaron con un doble tal como demuestra la teoría “Paul is Dead”. Otro caso famoso es el de Avril Lavigne, cantante reemplazada luego de su lamentable deceso. Reemplazo del que sobra evidencia en internet.

Ay, Pedrito

Lo mismo podría haber pasado con nuestro queridísimo Pedro Suárez de quien se dice que habría estado traicionando la confianza depositada en él por la dictadura fujimorista. Al parecer, la dictadura apostó por su estilo despreocupado, suelto y buena onda para distraer al público rock y pop, como lo hacía por su lado la tecnocumbia, mientras se levantaban el país en peso y encarcelaban o desaparecían gente.

Pedro Suárez Vértiz fue una Rossy War o una Ana Holer que escondía la tanga fujimorista debajo de sus jeanes rotos.

Pero un rockero es una persona distinta al resto…

Pedro no dormía bien pensando en que se había convertido en un fujimorista por omisión y empezó a escribir canciones que parecían no decir nada, pero que en el fondo nos estaban contando la forma en que Pedro, el artista, se encontraba cara a cara con su tiempo.

‘Mi auto era una rana’ cuenta la historia de los cochebombas que los terroristas colocaron por todos lados. Al final del verso reconoce la deuda de la historia con los policías del GEIN quienes a pesar de la oposición del gobierno fujimorista fueron gestores de la captura de Abimael, el principio del fin de Sendero Luminoso.

La historia y el Estado, como sabemos, poco ha hecho por darles el lugar que les corresponde.

“Bajé del auto con cuidado,
se me acercó un verde señor,
disculpe jefe, no me lleve soy cantante
y le prometo hablar de usted en esta canción”.

Parecido es el caso de ‘Los globos del cielo’ que dice:
“Voy a tener los globos del cielo en esta noche,
resbalaré hasta explosionar entre tus montes”.

Los globos del cielo son una metáfora de las cenizas elevándose al cielo en los hornos donde el Estado fujimorista desapareció gente, entre terroristas y civiles inocentes, lo que no sirvió más que para distanciar a la población del Estado y potenciar el discurso terrorista que “explosionaría entre sus montes”. Dura crítica al gobierno, tan dura que el gobierno no la dejaría pasar así nomás.

A Pedro lo habrían invitado a tomar un café al sótano del SIN. Se dice que se sentó en una mesa con Fujimori y Montesinos. Lo que se supuso sería una amena conversación terminó en una discusión a gritos y con la tensión in crescendo.

    • ¡Terrorista! -le gritaban al cantante
  • ¡Corruptos y asesinos! -respondía con la misma voz con la que enamoraba al Perú en las radios durante todo el santo día.

A Pedro quizá lo amenazaron, le dijeron que debería irse del país si no quería terminar como los globos del cielo. Pedro sabía que no podían hacer eso con alguien tan talentoso e importante como él así que decidió negociar, se iría si, pero pondrían un reemplazo en su lugar. Alguien idéntico a él que trabaje para que su legado no muera y así se hizo.

Esa misma noche Pedrito hizo su maleta, dejando todo y a todos en el país que le había dado tantas alegrías. En una libreta humedecida por las lágrimas que caían sobre ella escribió la primera línea de lo que sería uno de sus hits más importantes.

‘Cuando pienses en volver’ escribió el artista.

Durante años han sido más de uno los encargados de reemplazar a Pedro. Por momentos parecía no envejecer nunca pero… ser artista no es fácil y menos en el Perú… y menos aún si vives de antiguos éxitos ajenos y sabes todo el tiempo que los aplausos que recibes no son tuyos. El tema se ha salido tanto de control que los ‘doppelganger’ de Pedrito ya ni siquiera se preocupan en parecerse a él.

¿Quién será el encargado de tomar el nombre del valiente Pedrito en estos tiempos de crisis política? El anuncio sigue dando vueltas en internet: se busca artista para difundir la letanía de los conservadores y repetir los discursos de un fujimorismo desesperado y sin argumentos para defenderse del azote de sus propios crímenes y delitos.

No me es extraño que Pedro pida que “no lo politicen” como Alberto Fujimori pide, quizá a sus propios hijos, que “no lo usen en política”.

Pero el fujimorismo no quiere a nadie: ni a propios ni ajenos.

Aquí estaremos Pedro ‘cuando pienses en volver’.


[Esta es una obra de ficción]

Escena a la norteña

Hace poco viajé a Trujillo para presentarme con mi banda Diazepunk luego de ocho años. En nuestro concierto se presentaron Mr Pucho, Sour y Verano del 83 de Trujillo; Andariel de Chimbote y Las Ratapunks de Cajamarca, y desde Lima Riviere. Entrevisté a tres de las bandas con las que compartimos escenario esa noche para entender un poco cómo se mueve la escena independiente en el norte del Perú. 

Sour - Trujillo
Sour – Trujillo

Cuatro mujeres punks

Las Ratapunks - Cajamarca
Las Ratapunks de Cajamarca con Jahizuno.

Las Ratapunks son una banda punk de Cajamarca conformada por cuatro chicas. Para el concierto en que nos juntamos en Trujillo cantó Irma, la baterista, que en algún momento en los inicios de la banda fue vocalista. La batería la tocó Jahizuno, de la banda Yo estuve en Japón, siendo el primer integrante masculino en participar en el cuarteto. Irma reemplazó a YK (Yeka), la vocalista oficial que, trabajando en Arequipa, no tenía cómo escaparse para llegar a la tocada. Wendy en el bajo y Kiara en la guitarra fueron las únicas que no cambiaron su lugar en el escenario esa noche. El cambio no fue notificado a la producción por temor a perder la oportunidad de participar en el concierto. A pesar del desorden en la formación, el show mantuvo la esencia, la fuerza y el carisma que esperábamos quienes conocimos a la banda por los videos de Sawá sesiones en youtube.

Las Ratapunks son cuatro chicas que se conocieron en los conciertos de la escena punk de Cajamarca. Un día, sin mayor experiencia musical que unas cuantas notas, cogen guitarras para subir a un escenario y sueltan su rollo en público. Es curioso: las chicas admiten haber aprendido a tocar en el escenario y, cuatro años después de su fundación oficial, no se reconocen aún como músicos. Su propuesta es subirse al escenario y soltar en una canción todo lo que les provoque expulsar: “Quien tenga ganas de tocar y decir lo que le viene en gana debería mandarse y decirlo” sugiere Kiara, guitarrista de la banda.

Ser mujeres puso mucha atención en ellas y eso tiene pros y contras. Si bien les ha abierto las puertas de la escena y las hace reconocibles y distintas en una escena mayormente poblada por bandas de hombres, les ha conseguido un número importante de ‘haters’ atentos a cada error que cometen y dispuestos a usar esos errores como argumentos para que no se les conceda escenario. En un país tan machista como el nuestro, sostener un show tan potente en el escenario es, por definición, un acto de rebeldía.

Sin embargo, no se definen como una banda “feminista”.  Las Ratapunks consideran vigente el discurso feminista y se sienten cercanas a él, pero se les hace pesada la etiqueta. “Más que la etiqueta de feminismo, comprendemos la situación desigual de la mujer en la sociedad. Es evidente, habría que estar ciego para no verlo. Pero con la movida hay ciertos puntos en los que nos cuesta coincidir”, comenta la guitarrista.

Como muchas bandas independientes del país, ellas mismas autogestionan sus conciertos y venden copias sencillas de sus discos en ferias y así sostienen su propuesta, aunque esto les limita el acceso a grabaciones profesionales o impresiones de mejor calidad. ¿Y si algún día sus canciones suenan en la radio?, pregunto curioso, ¿qué harían? Y ellas responden sorprendidas: ¡¡Qué valientes!! Y eso porque su propuesta no está dirigida aún a ese tipo de masificación. A pesar de sus limitaciones musicales y la poca fe que parecen tenerse, Las Ratapunks es probablemente la banda femenina de punk con más potencial en el país. No dudo que con el tiempo y la constancia, puliendo y redondeando su propuesta, podrían llegar lejos. Habrá que verlas en unos años.

Dreampop trujillano

Verano del 83 - Trujillo
Verano del 83 te hace sentir bien, su presentación calma la ansiedad del común de presentaciones de rock

Verano del 83 es una banda particular no solo por sus seis integrantes sino por la cantidad de recursos musicales en el escenario: distintos teclados profesionales y de juguete;  y un ukelele, guitarras, bajo y batería. 

Conversé también con Hanny (voz y guitarra), Alison (teclado) y Christy (bajo) 

¿Cuál es su género? Hanny (voz y guitarra) define a Verano del 83 como una banda de ‘Dreampop adolescente’ y creo que el título define bien lo que proyecta su música. Verano del 83 te hace sentir bien, su presentación calma la ansiedad del común de presentaciones de rock, su música genera un ambiente nostálgico con sonidos que recuerdan a los 80 y sus letras hablan de quererse y ser amigos. Verano del 83 es una banda que, sin miedo, pone de nuevo en valor la ternura abandonada por los estereotipos rockeros.

La banda ensaya mínimo una vez por semana y se esfuerzan en tener una presentación cada fin de semana. “La escena no está muerta si no la dejan morir”, responde Hanny a la sensación de frustración y decepción que muestran algunos músicos al hablar de la crisis por la que pasa la escena trujillana, donde es normal que los locales cancelen fechas sin mayor aviso.

Como en todo el Perú, las bandas que se mantienen haciendo música son la vanguardia y la resistencia a la poca y esporádica atención del Estado y el desinterés de los medios de comunicación por las apuestas locales. Los Verano del 83 resisten a esta tendencia y promueven conciertos, discos, videos, canciones, y demás productos culturales. La banda ha firmado con el sello Emma’s House Records de México y ha llevado sus canciones por México, Argentina, Rusia y Japón entre otros países.

Micky Bendezú fundador, manager y productor de la banda, con quien no pudimos coincidir para la entrevista, fue mencionado varias veces por sus compañeras. Todos reconocen que su gestión permite a la banda tener un lugar en medio de las limitaciones de una escena como la trujillana. Los equipos de sonido que ha ido comprando facilitan a la banda no solo armar conciertos con rapidez, si no también involucrarse en otros eventos y fortalecer relaciones con otros productores, incluso de otros géneros musicales tan distantes como el ‘grindcore’.

Esto es importante: en una escena como la de Trujillo es necesaria la unidad y superar las insostenibles distancias impuestas por la tradición y los géneros musicales para congregar a un público acostumbrado a los festivales gratuitos de cervecerías y empresas de telefonía o a las bandas de covers que llenan los bares de la ciudad.

Además, y no por eso menos importante, el público de estos conciertos aporta con su presencia y es positivo dejar de lado prejuicios y escuchar todas las propuestas de la ciudad: newmetal, punk, grindcore o dreampop adolescente. El espectador se reconoce en ellas y en ellas a su escena. “El hecho de hacer conciertos y mezclar todo ha hecho que nos unamos más, como bandas, como escena acá en Trujillo”, comenta Christi.

Las salas de ensayo son el punto de encuentro para las bandas de Trujillo. Allí se aprende a tocar y a gestionar. Se pasan horas en la sala no solo ensayando sino conversando con otras bandas, compartiendo tiempo y también algunas cervezas, pero “nunca tan destroy” aclara Alisón.

El video de Amigo publicado el año pasado les abrió muchas puertas. Llamó la atención de la Alianza Francesa y luego de la municipalidad y empezaron a llamarlos para sus eventos. El público empezó a pedir el tema y cantarlo en las presentaciones en vivo y eso ha servido como aliciente para seguir en esta difícil aventura. Verano del 83 se toma en serio esto de la música, es mucho lo que sacrifican para poder mantener viva la banda, entre ensayos, presentaciones, la familia, el trabajo y los estudios casi no quedan horas siquiera para dormir, de ahí seguro que sean una banda tan disciplinada y capaz de atreverse a soñar con el mundo: cualquier otro objetivo sería mezquino con su esfuerzo y las bondades de su propuesta.

La situación de Mr. Pucho

Mr Pucho - Trujillo
Mr Pucho viene de los conciertos “de la escena” pero ha logrado abrirse las puertas de festivales con bandas de Lima y financiados por empresas grandes de cerveza y telefonía.

Casi saliendo para el aeropuerto pude sentarme un momento a conversar con Kri (guitarra) y Pancho (voz) de la banda trujillana Mr. PuchoLa banda viene de los conciertos “de la escena” pero ha logrado abrirse las puertas de festivales con bandas de Lima y financiados por empresas grandes de cerveza y telefonía. La estrategia se la deben a su manager, Sharon, quien además de vestirlos y uniformarlos para destacar de las demás bandas, les propuso tocar gratis en todos lados donde se les llame durante un año. “Donde levantes una piedra ahí debe estar Mr. Pucho”, comenta Pancho para describir la estrategia.

Una vez que la banda y sus canciones se hicieron un poco conocidas empezaron a buscar espacios donde se reconozca económicamente su trabajo como músicos. Así llegan a los festivales con canciones que se mueven entre el reggae, el ska y el punk. Son una de las bandas independientes más reconocibles de la escena trujillana y eso se debe a muchos años de esfuerzo, ensayo y trabajo.

Mr. Pucho reconoce también la crisis de espacios para conciertos: “Antes teníamos Chasca, Bohemios, locales donde diversos promotores hacían conciertos cada fin de semana y se oxigenaba la escena”. Lo que falta es difusión. La noche del concierto una cervecería hacía el Oktoberfest y la legendaria banda trujillana Extraño Deseo celebraba 25 años. Es decir, oferta hay, pero: ¿cómo amplificar la difusión? ¿Cómo aumentar la demanda? Nadie consume lo que no conoce. Como escena, ese es el próximo paso, y para darlo de manera efectiva necesitan trabajar en conjunto bandas y público, construir complicidad para crear los medios que no hay, y así amplificar la voz y las fuerzas. Un ejemplo son las Sawá sesiones que tanto han hecho por la difusión de la música en Cajamarca.

Los Mr. Pucho aspiran a la internacionalización y trabajan con ese norte. No son una banda a la deriva, se piensan, se entienden, se construyen y dejan cimientos a su paso. Hay que estar atentos a los Mr. Pucho que vienen siempre con cosas interesantes como el videoclip de Why? you know,  una grabación de 24 horas encargada a los chicos de Pasaje 18.

Andariel - Chimbote
Andariel – Chimbote

Regresé a Lima contento de encontrarme en Trujillo con distintas bandas y propuestas que dejan la sensación de que en las escenas de Cajamarca, Chiclayo y Chimbote abunda el talento y el entusiasmo, pero queda claro que esa energía necesita de espacios y articulación para seguir avanzando.

El norte no espera, el norte propone y actúa.
Estemos atentos.